Lo que necesitas para ser Realmente feliz.
En su catequesis. el Papa Francisco señalo a los diferentes tipo de esclavitud, ya sea interior o ixterior, que existen en la actualidad. "Estan las retricciones externas, como las opresiones, las vidas secuestradas por la violencia y otros tipos de injusticia".
En otro orden, "estan las prisiones interiores como, los bloques psicológicos, los complejos, los limites de carácter o de otra clase".
Ante estas circunstancias, el Santo Oadre se preguntó: "¿Existe descansi en estas condiciones? Un hombre preso u oprimido, ¿Puesde ser libre? y una persona abrumada por dificultades interiores, ¿Puede ser libre?".
" Efectivamente, hay peronas que, permaneiendo presos, viven una gran libertad de animo". En el mismo orden, "hay personas marcadas por grandes fragilidades interiores que, sin embargo, conocen el reposo, el descanso de la misericordia y lo saben transmitir".
"La misericordia de Dios, te libera, y cuando te encuentras con la misericordia de Dios tienes una libertada inmenza y eres capaz de transmitirla. Por eso es de suma importancia abrirse a la misericordia de Dios, para dejar de ser preso de uno mismo.
Ante estas grandes discrepantes situaciones, "¿Qué es, entonces, la verdadera libertad? ¿Quizás consiste en la posibilidad de elegir? Ciertamente esta es una parte de la libertad, y nos esforzamos para que se dé a todo hombre y mujer. Pero tenemos conocimientos que poder hacer eso que se desea no es suficiente para ser verdaderamente libres, no tampoco felices. La Real libertad es mucho mas", aseguro el Papa.
"De hecho,-Subrayo el Papa- hay una esclavitud que encadena mas que una prisión, más que una crisis de pánico, más que una imposición de cualquier género: la esclavitud del propio ego".
El Pontífice continuó: " El ego puede convertirse en un tormento que tortura al hombre esté donde esté, y que le produce la más profunda opresión, aquella que se llama "pecado", que no es la violación trivial de un código, sino el frazaso de la existencia".
Frente al ego, el Papa digo el don del amor que se manifiesta en el tercer mandamiento: "Que motiva a celebrar con el reposo la liberación, para nosotros cristianos es la profecía del Señor Jesús, que destruye la esclavitud interior del pecado y hace al hombre capaz de amar".
"El amor verdadero es verdadera libertad: ayuda a desprenderse de las posesiones, reconstruye las relaciones, sabe acoger y valorar al proximo, transforma en don alegre toda fatiga y capacita para la comunión, El amor regala la libertad incluso en la carcel al preso, aunque sea débil o se esté limitado".
El Pontífice concluyó: "Esta es la libertad que recibimos de nuestro redentor, el Señor Jesucristo, que sabe vencer la esclavitud de nuestro corazón con su amor y su salvación. Él, que nos ha amado mientras estaba clavado en la Cruz, nos abre el camino por medio del mar de nuestros miedos y nos da la verdadera libertad. en Él cada hombre puede encontrar el reposo de la misericordia y de la verdad que nos hace libres".
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